El CSS es uno de los códigos que menos quería tocar, sin embargo, estos días me he topado con éste por necesidad.
Pasa que estoy desarrollando un sitio para un cliente y deseo dar mi mejor esfuerzo en su creación, de manera que valide, si es posible y que se vea bien tanto en los exploradores normales como en Internet Explorer.
Para hacerlo, debo tocar el CSS. En esta empresa me han ayudado Kyuumeitai y Wachunei. He estado prestando atención a lo que me explican y dicen y puedo darme cuenta de que no es tan difícil a como me lo imaginaba.
El código HTML queda mucho más limpio y entendible y el CSS queda ordenado con un poco de paciencia. Es la matemática del asunto.
Para ayudarme, he buscado mucho en Google internet sobre el como muestra MSIE el CSS y he dado con esto, que explica como trata MSIE y los demás navegadores.
Por último, encontré una herramienta bastante útil para hacer las comparaciones.
Es así como cual San Jorge, estoy decidido a derrotar al «Dragón» CSS.
Actualización: la imagen que aparecía acá la he perdido y no volveré a colocarla.